Hace unos años oí una entrevista a Quique Sanfrancisco en la radio. Entonces Pablo Motos dirigía No Somos Nadie en M80, y Sanfrancisco era uno de los colaboradores habituales. Durante muchos, muchos años fui seguidora del programa, que oía con cascos mientras pasaba interminables horas delante de mi ordenador en uno de mis primeros trabajos. A lo que iba, la entrevista iba sobre la cerveza. Quique Sanfrancisco presumía de ser un gran bebedor de cerveza, pero no de cualquier manera; defendía que la cerveza necesita unos condicionantes que deben cumplirse y respetarse. Que si no, la cerveza pierde, y mucho. Yo, amante de la radio, de Pablo Motos y Sanfrancisco (bueno, de estos, más que amante, seguidora, je, je…) y de la cerveza, no perdí ripio de la entrevista, y cogí buenos consejos que he seguido desde entonces fielmente, y a los cuales le he añadido de mi cosecha para elaborar esta lista de imprescindibles para disfrutar de la cañita de verano, todo el año. Por que la cañita en verano mola, pero en mi ciudad, con un clima que ya lo quisiera para sí el resto de España 😉 yo me tomo la cañita «de verano» en la terraza de turno, todo el año. ¿Tú también quieres? Ahí va mi lista
La cerveza ¿mejor en vaso o en botellín?
Los 7 + 1 imprescindibles para la cañita perfecta
1. Botellín. Primer consejo de Enrique Sanfrancisco. Si puedes pedir un botellín, mejor que un vaso o copa. El botellín tiene el cristal más grueso y la forma con cuello estrecho hace que conserve más el frío. Y la cerveza caliente no le gusta a nadie, por mucho que la tomasen así en Los Pilares de la Tierra. Para ellos.
2. Caña. Por el mismo motivo –mantener el frío– el segundo consejo de Q.S., si no puedes pedir un quinto, que sea una caña. Si pides un doble va a ir perdiendo frío. Pides una caña y cuando se te acaba pides otra, y las dos te las tomas a la temperatura óptima.
3. Muy fría. Me remito al punto 1. La cerveza fría, muy fría. Yo en casa la tengo en la zona «Cero» que se supone que es para mantener los perecederos a una temperatura entre la nevera y el congelador, pero… ¡que le den a los perecederos, la zona Cero está ocupada con las cervezas!
4. Copa helada. Aquí seguramente el Sr. Sanfrancisco y yo discreparíamos, pero me encanta ver la cerveza a través del cristal helado, total es un segundo, pero me encanta. Eso sí, os tenéis que asegurar de no mojar la copa antes de congelarla, porque generaría hielo que pasaría a la cerveza al pasar a temperatura ambiente.
5. Bien tirada. Yo no sabía qué era una cerveza bien tirada hasta que fui a Madrid. Esa espuma que parecía de gel, espesa, y que se mantuvo mientras el contenido bajaba. Señores hosteleros del resto de España ¡aprendan a tirar bien la cerveza! No puede ser tan difícil…
6. Tapa. Si eres de los que tras una cañita va la siguiente, haz caso del consejo 2, y además pide una tapa. La cerveza está muy rica, pero no deja de tener alcohol…Yo lo tengo más fácil porque donde me tomo mi cañita de verano todo el año, la tapa va con la caña, ¿y sabés cómo se llama el bar? «La Cañita», si es que me lo ponen fácil…
7. Amigos. ¿A que no te imaginas la caña sin los colegas? Claro, si es que en este país ¡quién puede decir que no a la frase «¿una cañita?»! Se disfruta mucho más…
7 + 1. Posavasos. Y aquí mi segunda llamada a los hosteleros. Con todo lo que tienen en su local comprado en suministros para hostelería (platos, vasos, cubiertos, copas, mesas, sillas, banquetas…) señores camareros, barmans, dueños-de-bares-y-cafeterías, ¡pongan un posavasos debajo de nuestras bebidas! Porque temo a ese charco que se acerca peligrosamente a mi smartphone y me canso de ir haciendo diques con las servilletas 😉 Un cartón, lo imprimes por cuatro duros (si hasta lo puedes imprimir online!) y yo dejo de sufrir. Permitan que disfrute de mi cañita de verano… todo el año.
Un posavasos bajo mi caña, por favor, y a ser posible así de bonito